miércoles, 13 de mayo de 2020

RECETAS PARA EL ENFADO

Hoy vamos a ver recetas que pueden servirnos para los momentos en los que estamos enfadados. 
Es importante saber que a cada uno nos funciona una cosas diferente para calmar nuestro enfado. Por lo que tendremos que elegir y trabajar aquellas técnicas que nos funcionen, no todas.


  1. Lo primero de todo, es muy importante reconocer el sentimiento y validarlo. Primero necesitarán que pongamos palabra nosotros a aquello que ellos sienten y no saben decirnos. Por lo que usaremos una expresión como: "Sé que estás enfadado porque...".
  2. Dar contacto físico en ese momento si es necesario y si el niño lo permite. Abrazando y balanceando, acariciando... Es un contacto físico sensorial y como tal tiene que ser agradable para el niñ@. Si sabemos que le molesta tocarle la cabeza, no usamos este contacto físico en este momento. Generalmente, ante momentos de enfado, lo que mejor funciona es un abrazo fuerte (que ofrece propiocepción) acompañado de balanceo (que ofrece información vestibular).
  3. Tenemos que tener claro que en los momentos de enfado, lo primero que hay que hacer es esperar a que dicho enfado disminuya. No ayuda nada en esos momentos que le hablemos ni intentemos explicar. 
  4. Cuando el enfado haya disminuido, será cuando podamos hablar de lo qué ha sentido y porque. Y lo haremos desde la calma, desde una postura conciliadora. 
  5. Si tenemos diario de las emociones, acudiremos al mismo, dibujaremos lo que nos ha pasado y por qué.
  6. Después, buscaremos alternativas a cómo podíamos haber reaccionado ante esa situación para no llegar a enfadarnos tanto. Y dibujaremos las alternativas en el diario de las emociones.
Cuando los niñ@s aprenden a ser conscientes de sus emociones, de lo que han sentido y por qué, entonces podemos empezar a trabajar los grados de la emoción y la anticipación a la aparición de la misma.

Establecemos cómo sentimos nosotros los GRADOS DE LA EMOCIÓN:
- POCO: cuando empezamos a sentirlo. Qué cosas nos hacen tener un enfado pequeño.
- MEDIO: cuando ya notamos mucho más el enfado. Qué cosas nos hacen sentir un enfado medio.
- MUCHO: cuando ya estamos muy enfadados y no podemos parar. Qué cosas nos hacen sentir mucho enfado.

La ANTICIPACIÓN se puede realizar cuando el enfado está en un nivel POCO o MEDIO. Pero en el momento en el que pasamos a un nivel MUCHO, hay que esperar pacientemente a que vuelva a disminuir porque en ese momento el cerebro no atiende a razones.
Por lo tanto, lo ideal es empezar cuando el enfado está en un nivel POCO. En este momento, tendríamos que validad la emoción y explicar por qué la estamos sintiendo y comenzaríamos a aplicar recetas para que el enfado no crezca más.

Y aquí os dejo algunas RECETAS PARA EL ENFADO, que también nos sirven para la relajación en general y el autocontrol.

- RESPIRACIÓN: cuando estamos enfadados, realizamos respiraciones más cortas y rápidas. Conseguir controlar la respiración, alargando su duración y haciéndola más profunda, hace que nuestro cerebro disminuya el nivel de alerta y pueda volver a pensar y ofrecer soluciones. Os dejo dos imágenes para trabajar la respiración. Pueden usarse de distintas formas:

  • Por un lado, cada elemento (globo o escalera) puede ser una respiración completa.
  • Por otro lado, un elemento puede ser la inspiración y el siguiente elemento la exhalación.
  • Por último, el ejercicio más difícil es inspirar en 10 partes, un poquito en cada elemento hasta llegar al 10, y después ir exhalando también lentamente en 10 partes.



- CUENTO RESPIRA: es un cuento precioso que trabaja la respiración y la relajación a través de distintas posturas de yoga.



- Existe otra técnica de respiración que se llama LA NUBE. Aquí os dejo un vídeo para poder practicarla.


- EMOTICANTOS: Esta canción es muy divertida. Pone de manifiesto cómo nos sentimos cuando nos enfadamos y nos ofrece la técnica de respiración para tranquilizarnos.

- TÉCNICA DE LA TORTUGA: aquí os dejo un vídeo con la técnica de la tortuga. Consiste en saber parar, calmarnos dentro de nuestro caparazón y volver a salir cuando estemos tranquilos.


- RISOTERAPIA: sonreír, aunque sea sin ganas, estimula zonas cerebrales relacionadas con sentimientos de bienestar. En este sentido, podemos utilizar la técnica del lápiz, que consiste en meter un lápiz en la boca en horizontal y sujerarlo con los dientes durante 15 segundos. Los músculos se relajan y el cerebro segrega dopamina para sentirnos mejor.

- FRASCO DE LA CALMA: podéis consultar en Internet tutoriales para fabricaros el vuestro propio.

- BUSCAR LA ESTIMULACIÓN SENSORIAL que nos proporciona calma: a algunos nos ayuda la vibración; a otros, la música; a otros, el tacto (para lo que buscan manipular o tocar objetos con una determinada textura)...

- PINTAR MANDALAS, ESCUCHAR MÚSICA RELAJANTE, OLER UN DETERMINADO OBJETO...

Todos estos recursos pueden estar en un RINCÓN DE LA CALMA que creemos para acudir a él cada vez que lo necesitemos. Al principio necesitarán mucha ayuda nuestra para gestionar y ser capaces de ponerlo en práctica. Poco a poco, trabajaremos la autonomía para que puedan ir realizándolo sin nuestra ayuda.

Si se os ocurren más recetas, las podéis poner en comentarios. Gracias!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario